Hemos preparado un emocionante programa de medio día para cuatro Grätzel especiales situados a poca distancia del centro. El programa es perfecto para todos aquellos que, además de los lugares de interés más emblemáticos, quieran conocer de cerca el verdadero y rico ambiente de los barrios de Viena.

Karmeliterviertel

Gusshausviertel y Freihausviertel

Servitenviertel

© WienTourismus/Erli Grünzweil

En nuestra página general sobre Grätzel podrá descubrir todos los demás distritos.

Karmeliterviertel

El Karmeliterviertel está a pocos minutos a pie de la Schwedenplatz y del canal del Danubio y en él se aprecia la historia judía por todas partes. El Karmelitermarkt está situado en pleno centro del barrio. El mercado no sólo cuenta con puestos de frutas, verduras y flores, sino también con numerosos restaurantes y cafeterías.

• Karmelitermarkt

El Karmelitermarkt es el primer mercado energéticamente autosuficiente de Europa y cuenta con su propio sistema fotovoltaico. Además de los tradicionales puestos de frutas, verduras y flores, todos los viernes y sábados hay un mercado de agricultores. También goza de una gran oferta gastronómica.

• Augarten y Augarten Manufacturas de porcelana

El Augarten es un parque barroco que invita a pasear o a disfrutar de un picnic rodeado de un bonito paisaje florido y extensas avenidas. En Augarten también se encuentra la Fábrica de Porcelana de Augarten. Sumérjase en el fascinante mundo de la porcelana vienesa en una visita guiada y conozca apasionantes historias sobre este especial material y las personas que lo diseñan, utilizan y coleccionan.

• Concierto de los Niños Cantores de Viena en MuTh

Los Niños Cantores de Viena deleitan al público de todo el mundo y están considerados como los embajadores más jóvenes de Viena. Se puede disfrutar de sus voces regularmente en su propia sala de conciertos «MuTh».

Recomendaciones para comer:
El pescado y el marisco ocupan un lugar central en el menú del elegante Restaurante Spelunke, en el canal del Danubio. En el Karmelitermarkt, el Tewa sirve cocina orgánica de influencia oriental-mediterránea, mientras que el Zimmer37 es una tienda gourmet y restaurante en uno. A pocas calles de distancia, el Skopik & Lohn seduce con su atractivo interior, pequeños platos y ricos cócteles. El Restaurante Sperling se encuentra directamente en el Augarten y ofrece platos sencillos que van desde el Schnitzel y el filete hasta Buchteln (bollitos de levadura rellenos de mermelada). Para tomar un café y un pastel, el acogedor Fett+Zucker, con sus bonitos muebles de época, es sin duda una parada obligada.

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Gusshausviertel y Freihausviertel

La mejor manera de recorrer los Grätzel vecinos Gusshausviertel y Freihausviertel es empezando por la Karlsplatz, en el centro de la ciudad. Justo detrás de la Iglesia de San Carlos, uno de los monumentos más emblemáticos de Viena con su enorme cúpula verde, encontramos dos barrios que tienen mucho que ofrecer: desde museos de peso mundial hasta modernas galerías, pasando por tiendas de moda y restaurantes excelentes.

• Wien Museum

Tras reabrir en 2023, el Wien Museum de Karlsplatz es ahora un edificio completamente reformado y ultramoderno. El museo documenta la fascinante historia de Viena desde los primeros tiempos hasta la actualidad. La exposición permanente es gratuita.

• Museo del Tercer Hombre

El Museo del Tercer Hombre es una visita obligada para los cinéfilos y cualquiera que desee saber más sobre la posguerra en Viena. El museo cuenta con nada menos que 2500 piezas originales, como guiones, carteles, cámaras de cine y proyectores, y profundiza de forma fascinante en los antecedentes y la historia de la creación del cine.

• De compras por la Schleifmühlgasse

La Schleifmühlgasse es el epicentro del Freihausviertel. Además de tiendas populares, esta animada calle presume de bares y galerías de moda. Con su colorida mezcla de tiendas (desde ropa y muebles hasta comida), es el lugar perfecto para ir de compras.
 
Recomendaciones para comer:
El Café Anzengruber es un punto de encuentro para todos los enamorados del Schnitzel. Para probar tartas caseras, vale la pena hacer una visita a la Vollpension, en la Schleifmühlgasse. Este café para todas las edades parece la sala de estar de una abuela, y es que en él trabajan personas mayores que demuestran sus habilidades reposteras. Para disfrutar de la cocina tradicional vienesa, recomendamos el negocio familiar Buchecker & Sohn o el Gasthaus Ubl. Ubicado en el jardín del palacio del archiduque Carlos Luis, el Carl Ludwig Café destaca por sus especiales cafés, dulces y su maravillosa terraza con sillas de colores.

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Servitenviertel

Este barrio pintoresco emana un singular estilo francés y queda cerca del Museo Sigmund Freud. En el centro del Servitenviertel encontramos la Servitengasse. Las casas históricas están muy bien conservadas y ofrecen una imagen maravillosa. El barrio también cuenta con numerosas terrazas y establecimientos que invitan a relajarse y reponer fuerzas.

• Museo Sigmund Freud

Si le interesa la vida de Sigmund Freud, no puede perderse su vivienda en Berggasse 19, en el Servitenviertel. El fundador del psicoanálisis vivió y trabajó allí durante casi 50 años. La vivienda alberga un fantástico museo en el que se pueden visitar todas las estancias privadas de Freud y descubrir cómo surgió el psicoanálisis.

• Palacio Jardín Liechtenstein y Strudlhofstiege

El Palacio Jardín Liechtenstein es un magnífico palacio barroco con un hermoso parque. Alberga una extraordinaria colección privada de arte (desde Rubens y Rafael hasta Rembrandt) y ofrece visitas guiadas (¡hay que apuntarse!). La Strudlhofstiege está situada junto al palacio. Esta famosa escalinata data de 1910 y es un bello ejemplo del modernismo vienés con sus escaleras curvas y barandillas verdes.

• Visita a un cementerio histórico: cementerio judío de Rossau

En el patio interior de la residencia de ancianos en la Seegasse se encuentra el cementerio judío más antiguo que se conserva en Austria. En 2013 se descubrieron aquí lápidas centenarias durante unas obras de restauración. Desde la terraza de la residencia de ancianos, los visitantes pueden disfrutar de unas buenas vistas a este cementerio, cuya historia se remonta a mediados del siglo XVI.
 
Recomendaciones para comer:
El bistró francés La Mercerie, en la Porzellangasse, sirve eclairs, tartas y clásicos como la quiche lorraine. En la panadería propia, los clientes pueden comprar cruasanes y baguettes frescos todos los días. Justo enfrente, Plain sirve soul food saludable con una gran selección de platos veganos. En la Berggasse también se come bien. Los restaurantes Zum Roten Bären y Rebhuhn miman a los clientes con platos tradicionales vieneses. El Pramerl & the Wolf es también una parada obligada. En un ambiente acogedor, con una antigua barra de madera y paredes revestidas de madera, el restaurante sirve platos vieneses de interpretación moderna que le han hecho merecedor de una estrella Michelin. Es imprescindible reservar, puesto que tiene pocas mesas.

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